Los amantes de la naturaleza y de las actividades al aire libre pueden disfrutar de la experiencia incomparable del avistamiento de lobos salvajes o del impresionante espectáculo de la berrea del venado.

Los que han oído alguna vez el aullido del lobo coinciden en afirmar que no hay nada similar a la sensación que produce. Ese sonido potente y tan característico que emiten los lobos con el fin de comunicarse con sus congéneres puede llegar a oírse en un radio de varios kilómetros y no deja a nadie indiferente.

Los lobos han estado en peligro de extinción, por lo que hoy en día existen en España varias reservas naturales en los que son especie protegida. Este es el caso de los lobos en Asturias, donde se estima que habitan unas treinta manadas de lobos. Los lobos en Asturias se extienden por casi la totalidad del territorio, excepto en algunas zonas de la rasa costera y de las montañas orientales, y es posible verlos en libertad y realizar fascinantes fotografías.

Para ello, la mejor opción es participar en actividades organizadas por expertos que son capaces de seguir las huellas del lobo y encontrar los lugares seguros desde los que se puede esperar pacientemente para poder admirar el perfil imponente de estos fascinantes animales salvajes.

Pero, sin duda, una de las actividades en la naturaleza que ha alcanzado gran auge es la berrea del venado. Y no sin razón, pues realmente es un auténtico espectáculo que tiene lugar a principios del otoño y que dura unas tres semanas. Es en este momento cuando los impresionantes machos de ciervo ponen todo su empeño para conquistar al mayor número de hembras posibles, con el fin de fecundarlas para perpetuar la especie.

Lo más característico de la berrea son las increíbles luchas entre los machos para conquistar su harén y los impresionantes bramidos que emiten que se pueden oír desde grandes distancias.

En muchos montes españoles, como los de Asturias y Castilla León, es posible disfrutar de la berrea con gran facilidad. Son muchos los que se adentran por cuenta propia en un bosque para contemplar el espectáculo a primeras horas de la mañana o cuando comienza a anochecer. No obstante, aunque sí es relativamente sencillo oír los potentes bramidos, el avistamiento de los ciervos reviste mayor dificultad. Por ello, resulta aconsejable participar en actividades organizadas por expertos que conocen los mejores lugares para realizar el avistamiento en las mejores condiciones.

Tanto para el avistamiento de lobos como para el avistamiento de ciervos es preciso tener en cuenta el equipamiento que se ha de llevar a la montaña y que incluye ropa y calzado adecuados, así como unos prismáticos y cámara fotográfica.

Sin duda, los lobos salvajes que habitan nuestros montes son un auténtico legado que es preciso proteger y respetar. Su conservación nos permite, además, disfrutar de auténticos espectáculos de una belleza sin igual, como la berrea del venado, de los que solo la grandiosidad de la naturaleza puede ser responsable.